Sara, el vecino y la televisión del vecino: UN CASO DE ANSIEDAD ANTICIPATORIA


¿Y qué es eso de la ansiedad anticipatoria?...

Sara tiene un vecino. El vecino de Sara es mayor y por el volumen al que pone la televisión Sara deduce que su vecino debe padecer cierto grado de sordera  (Sara prefiere pensar eso a que el vecino la pone tan alta solo porque le apetece hacerlo). Parece ser que al vecino de Sara le encanta la televisión  de forma que está encendida unas 18 horas al día.

Sara vive en un apartamento a modo de estudio, con lo que es diáfano, es decir,  todo es una misma habitación: cocina, salón, dormitorio. Por lo tanto, Sara escucha la tele del vecino, cuando come, cuando descansa, cuando estudia, ………….cuando intenta dormir……… y un largo etc.

Resulta que el señor no apagaba ningún día  la televisión hasta las 2 de la mañana.

Hay que añadir que la protagonista de la historia es muy respetuosa con el espacio y tiempo de los demás y le cuesta comprender como hay  gente  que puede no pensar para nada en los demás.
Por poner un ejemplo: si alguna noche no puede dormir  y quiere ver la TV para hacer tiempo, Sara se pone unos cascos y si no los tiene, se aguanta y no ve la tele.
Sara, nada más entrar al apartamento se quita los zapatos, para no molestar con los tacones al de bajo. Especialmente cuando llega tarde por la noche.

Bien, pues Sara  empezó a estar nerviosa antes de irse a dormir porque ya presuponía que no podría hacerlo  hasta que el vecino también decidiera que tenía sueño y apagara la tele.
Sara no sabía si esa noche iba a o no a oír la televisión, pero ya estaba nerviosa, ya notaba que tenía cierto grado de ansiedad. Ya se decía cosas como:

“Seguro que la vuelve a poner alta”

“Ya verás como no me duermo hasta las tantas”

“Como no duerma esta noche bien y mañana haga mal la presentación...”


Este tipo de pensamientos iban poniendo a nuestra protagonista más nerviosa. En su cabeza ya se veía ella mirando el despertador a las  2 de la mañana, con los ojos como platos, preocupada por el cansancio que iba a  cargar con ella a la mañana siguiente.

Sara tenía diálogos imaginarios (ya cabreada) con el vecino.

El caso es que Sara no sabía  con certeza si el vecino pondría o no la televisión  hasta tarde, tampoco sabía si ella conseguiría dormirse aunque esto fuera así… Simplemente anticipaba los acontecimientos provocándose a sí misma con ello ansiedad y malestar general. Esto hacía que Sara no se sintiera ansiosa o nerviosa cuando la situación temida tenía lugar sino que también se sentía así antes de que ésta sucediera porque ya estaba adelantando los acontecimientos negativos en su cabeza.  A ESTO SE LE LLAMA ANSIEDAD ANTICIPATORIA  un concepto clave en situaciones cotidianas como ésta pero sobre todo en los TRASTORNOS DE ANSIEDAD.

La ansiedad anticipatoria hace que te suba el nivel de malestar y de nervios con lo que te encuentras mucho más sensible ante cualquier estímulo  que consideres negativo o nocivo para tu bienestar. Vas “calentando motores” antes de enfrentarte al estímulo que realmente temes, si es que acabas encontrándotelo.

Además, la ansiedad anticipatoria hace que estés mucho más focalizado en ciertos estímulos: los que temes o te molestan.
Sara, durante estos días, focalizaba su atención en cualquier ruido  de forma que en seguida pensaba que era su vecino otra vez con la televisión. Luego se daba cuenta de que algunas veces la fuente del ruido era otra y no la televisión del de al lado. Sara sabía que era un sesgo de atención.

Afortunadamente, nuestra protagonista es bastante directa, así que el problema duró unos días porque muy pronto Sarita decidió que no iba a permitir que la situación continuará así, ya que pensaba que ella tenía razón y que el hecho de que el vecino  durmiera cuatro horas al día no implicaba que ella se viera obligada a hacer lo mismo.

Así que…

Suena el timbre….

Sara: “Buenas noches, perdone que le moleste. Soy la vecina de al lado. Nos preguntábamos si a partir de las 12 de la noche podría usted bajar el volumen de la televisión porque  al tener el cabezal de la cama pegado a la pared… la  oímos bastante y claro… nos tenemos que levantar pronto por la mañana,…”

Vecino: Claro, claro. Disculpen las molestias. Por supuesto

El hombre resulto encantador y educadísimo  (En esta vida nunca sabes qué la clase de persona te vas a encontrar al otro lado de la puerta)

El vecino a los dos días se compró unos cascos de estos inalámbricos, lo que Sara le agradeció en el alma, y  a partir de las 23.30h o antes… Sara ya no vuelve a oír la televisión…. HASTA POR LA MAÑANA A LAS 7 DE LA MAÑANA. Ahora ya no necesita el despertador de toda la vida


La protagonista  aplicó la SOLUCIÓN DE PROBLEMAS. En este caso no necesitó estudiar mucho las alternativas porque  tenía claro que la mejor era ir directamente y comentárselo al vecino (otra alternativa hubiera sido decírselo al portero para que éste se lo comentará al vecino pero… ¿para qué intermediarios si lo tienes a la puerta de tu casa ¡sé valiente!).

Ahora Sara, visto que le pidió el horario nocturno y que el vecino reaccionó muy bien, no cree conveniente pedirle también que la baje un poco a horas matutinas . Aquí Sara no aplica ninguna técnica, aquí Sara aplica la santa paciencia.

Así que aquí tienes un ejemplo de la vida cotidiana de cómo conceptos tales como la “ansiedad anticipatoria” no se encuentran únicamente en trastornos psicológicos sino también en el día a día, en lo cotidiano.
Lo importante no es tanto que aparezcan sino  que te encargues de que duren poco buscando soluciones y llevándolas a cabo. 


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Comments

  1. Muy bueno Sara, es verdad , no hay que anticipar. Hay que solucionar y reaccionó perfectamente. Tenemos que parar y pensar la mejor solución. y hablar es una de las mejores. Gracias.

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  2. Me encanta! Es un ejemplo muy ilustrativo y está muy bien expresado! Así da gusto! Gracias! :)

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  3. Y si el vecino es grosero y no quiere bajarle el volumen y al contrario hace mas ruido?

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    1. Hola,
      Pues en este caso debemos echar mano de otro tipo de recursos que ya poco tienen que ver con la psicología, como por ejemplo hablar con el administrador de la finca, quejarse en la junta de vecinos o insonorizar la habitación.

      Saludos

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    2. Como este país está lleno de gente incívica, cuando te encuentras con alguien así lo único que suele funcionar darle de su propia medicina. Haz ruido tu cuando el duerme pero que sepa de antemano la razón. Y si no mejora, la opción de ostia con la mano abierta en plena jeta suele ser buena medicina también XD

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  4. La mayoría de la gente, al ser retrasada mental, no se da cuenta de que molesta, y actúa como si viviese sola en el vecindario, pero debería darse cuenta de que molesta...
    La técnica que usaría yo sería poner la tele o la música a un volumen extremo cuando esa persona esté descansando, para que se dé cuenta y espabile. La mayor parte de las veces la gente no entiende otro tipo de lenguaje que sea pagarles con la misma moneda.

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  5. Yo tengo una vecina que se tira largas temporadas sin apagar la tc, ya se lo dije una vez y es como si se lo dijese a la pared. Tengo la suerte que es salon con salon y no en el dormitorio asique puedo dormir bien, pero cuando estoy comiendo o en el salon haciendo algo y la tiene a toda ostia, yo tambien la pongo a toda ostia y listo, si me dice algo pues le respondere que la pongo asi de alta para no escuchar la suya.

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  6. Esta descripción de Sara habla totalmente de mi :( pero mi vecino dice que es su casa y hace lo que quiere, ya puse una pared con fibra de vidrio para intentar disminuir el sonido pero se sigue escuchando y siempre estoy temiendo que en cualquier momento va a poner su ruido, no se que hacer, oigo el ruido de otros vecinos y solo los ignoro, pero el vecino de al lado esta pegado pared con pared y siento que su sonido inunda toda mi casa, siento el sonido salir de mis paredes, me despierta los fines de semana y en la noche no me puedo dormir hasta que el apaga su ruido, y no le puedo hablar a la policía porque me van a decir que no es un ruido de una fiesta que es solo la tele.. pero de verdad el sonido se escucha en todos los cuartos e inunda todo , hasta siento como vibra , lo unico que podria salvarme es que se aburran de su aparato, tantos años viviendo junto a ellos y jamás habia escuchado nada, hasta este año que compraron algun tipo de bocina o no se que sea :( sufro mucho me quiero mudar pero no tengo dinero para hacer eso

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