Trastorno Paranoide de la Personalidad


Lidia  ve el mundo y la gente que habita en él como peligroso. Percibe a las personas como  “malas” por lo que hay que prestar atención e ir despacio, con cuidado, vigilando a todo el mundo por si acaso alguien se decide a hacerte daño.

Ella se ve a sí misma como una buena persona, alguien normal, honesta, inocente… alguien que no haría nunca daño a los demás. Si ella es así y los demás todo lo contrario, ¡ella va a tener la obligación de protegerse a sí misma!

No suele establecer relaciones muy íntimas porque, simplemente, no se fía de nadie. Y como no confía, no se acerca, no sea que el otro pueda causarle algún perjuicio.
El otro día, Luis, el chico que intenta  conseguir una cita con ella desde hace algunas semanas, le ofreció una copa y  ella la rechazó porque pensó que muy probablemente llevaría algún somnífero o algo similar para  así poder dormirla y llevársela a su casa para aprovecharse de ella. 

Lidia ve peligros dónde no los hay, aunque ella está segura de que la copa estaba envenenada y que fue una suerte que se percatara y no la aceptara.

El otro día, el cartero se encontró con ella en el portal y le dio en mano una carta que había recibido y que al parecer había llegado con cierto retraso. Ella pensó que el retraso de la carta se debía a que el cartero se la había estado guardando durante días para fastidiarla y que en caso de ser algo importante el contendido de la carta, Lidia saliera perjudicada. Ella  le soltó una bronca enorme por el retraso de la carta, alegando que era culpa suya porque no hacía bien su trabajo. Se puso furiosa (como se sentía atacada y en peligro, ella reaccionaba ante ese “ataque” defendiéndose)

Así pasa con todo: El mundo entero conspira contra ella.  Y nadie entiende cómo, pero siempre encuentra “pruebas” (evidentemente éstas distan un abismo de lo que podríamos considerar pruebas objetivas) que le hacen confirmar sus sospechas sobre los peligros que le acechan, lo que no hace sino confirmar sus temores.

En las relaciones de pareja, cuando consigue entablar una, suele tener muchos problemas. Razón por la que le duran tan poco. Tiene grandes dificultades para mostrar sentimientos de ternura, cariño y/o amor. Además de ello, Lidia sufre de celotipia, es una celosa mórbida. Sus parejas, cuando van por la calle, tienen que ir con la mirada pegada al suelo, de lo contrario Lidia cree que están mirando a otras mujeres y arma un escándalo. Éste es solo un ejemplo del comportamiento celotípico de Lidia.

En las amistades, las relaciones también son difíciles… Una de las razones, como ya te he mencionado antes, es que   Lidia no establece relaciones íntimas, le cuesta mucho por miedo a que le hagan daño. Pero además,  cualquier tipo de amistad es difícil ya que  Lidia siempre suele tener tendencia a maltratar psicológicamente a los demás. Tampoco tiene ningún sentido del humor. Esto junto al hecho de suelen culpar a los demás de sus problemas, no ayuda a entablar buenas relaciones.

Estas son algunas, aunque no todas, de las características de una persona con Trastorno Paranoide de la Personalidad,cuyo  tratamiento psicológico no puede aspirar a "curar" al paciente pero sí puede contemplar la posibilidad de resultar eficaz a la hora de mejorar la calidad de vida de la persona.







Sara Llorens Aguilar
Psicóloga en Valencia. CV-11230
sllorens@cop.es


Comments

  1. Buenas tardes,

    Sería posible que escribiera algún post sobre la Paranoia ?


    Gracias, igualmente.

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  2. Hola,

    Claro,tomo nota para uno de los próximos posts.

    Saludos!

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