La conferencia de la ponente Mª Jesús Alava Reyes en el congreso de Santiago sobre cómo actuar cuando las personas acuden a consulta por una situación de paro, me gustó especialmente. Primero porque el tema está , desgraciadamente, a la orden del día. Segundo, porque la forma en la que lo expuso fue muy práctica a la par que amena.
Hoy en día
acuden a consulta una gran cantidad de personas en paro. En mi experiencia
profesional me ocurre muy a menudo, sin embargo no suele ser el principal
problema por el que acuden a mi consulta.Aún así, su exposición me interesó
porque la vi muy acorde con mi forma de pensar y actuar, tanto en la vida como
en consulta.
Bien, en la
reunión se trataron los casos cuya razón para acudir a consulta era una
situación de paro y las consecuencias negativas a todos los niveles que ésta
estaba causando. Me gustó el abordaje de Mª Jesús por su enfoque sumamente
práctico y directo. Ella planteaba la terapia a modo de coaching
organizándola en diferentes fases. Te las comento brevemente a continuación:
Primera
fase: Creencias y pensamientos irracionales. Soledad
En esta primera
fase se tratan las cogniciones irracionales y emociones
negativas. Cuando una persona se queda sin trabajo suele disminuir la
autoestima, hay muchas emociones negativas (frustración, rabia, tristeza…) y
muchos pensamientos sobre uno mismo y su situación que pueden hacer mucho daño.
Lo primero es
trabajarlos para lograr que la persona tenga una predisposición adecuada para
ponerse en marcha. Esto es sentido común, ya que una persona deprimida difícilmente
podrá llevar a cabo los siguientes pasos con la energía y motivación con la que
debería llevarlos.
Segunda
fase: Ponerse en camino. Búsqueda personal de las propias aptitudes. “Carta a
los reyes magos”
Una vez se han
tratado los pensamientos que podrían resultar un obstáculo para nuestros
objetivos, planteamos al paciente que es un “agente activo” (de otra forma no
se podrá trabajar). La persona va a
centrarse en sus aptitudes como profesional
a la par que realizará una lista de los lugares dónde querría solicitar
empleo.
Si vemos que la
persona está cualificada y/o tiene potencial, es nuestro deber no dejarle que
coja “lo primero que encuentre”.
Tercera
fase: Remodelación del CV
Es importante
remodelar y actualizar el CV, destacando los puntos fuertes del solicitante.
Cuarta fase:
Enviar el CV. Búsqueda activa. Recuperar relaciones.
En esta fase el
solicitante empieza a enviar su CV a todos los lugares y empresas que sean de
su interés y campo.
Las relaciones
son un punto clave en estas situaciones. Es importante utilizarlas para
hacerles llegar nuestro CV y nuestra disponibilidad para trabajar. Hay que
recordar al paciente que no “está pidiendo trabajo” a sus contactos (muchas
veces esta visión hace que la persona no se atreva por vergüenza, miedo al
rechazo o similares) sino que está
informando de sus capacidades y disponibilidad laboral actual.
Las redes
sociales son un recurso muy valioso para encontrar un puesto de trabajo
adecuado.
Quinta fase:
Valoración de oportunidades.
Valorar las
oportunidades que se presentan, teniendo en cuenta que nuestro objetivo no es
“coger lo primero que venga”
Sexta fase:
Preparación de llamadas a los contactos y preparación para las entrevistas.
Ayudamos a la
persona a preparar el modo en que va a presentar el tema a sus contactos para
poder aumentar las probabilidades de éxito. También le ayudamos a gestionar su
actitud ante las entrevistas.
Apuntar que no todas las personas se toman el estado de paro ni la búsqueda de trabajo de igual forma. Hay muchos factores: forma en la que dejó de trabajar, puesto que ocupaba, nivel de vida, personalidad… que hacen que personas en la misma situación, se encuentren en estados muy diferentes. Dependiendo de la situación del paciente empezaremos en una fase o en otra.
Huelga decir
que cualidades como: asertividad, ambición, capacidad de reacción, tenacidad,
positivismo… facilitarán/dificultarán mucho la terapia en la medida en la que
se encuentren presentes en el demandante.
La
dificultad para encontrar trabajo hoy en día es elevada, pero aún así, la
actitud y la dirección que uno toma para conseguir sus objetivos son puntos
clave en cualquier desafío que la vida nos pueda presentar.
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