Los trenes de mi estación


Hay una pequeña metáfora que suelo usar con mis pacientes con TOC para ilustrar la diferencia de trato que dan a los "pensamientos  comunes" y a los pensamientos TOC (pensamientos obsesivos) y las consecuencias que ese comportamiento tiene. Esa diferencia de trato es resultante de la NO ACEPTACIÓN   de los pensamientos obsesivos debido a que la persona los interpreta erróneamente como amenazas. Y cuando alguien ve una amenaza, lucha contra ella o huye de ella.

Imagina que estamos en una estación de trenes ¿vale? Bien, pues tu mente es la estación y los pensamientos son los trenes.

Cuando un tren que te gusta o simplemente que te da igual (pensamiento no obsesivo) llega a la estación: el tren se para, bajan unos pasajeros, suben otros... y cuando llega la hora de irse, el tren sale puntual de la estación para llegar a su destino. Todo bien. 
Sin embargo, cuando llega un tren que tú consideras que se ha equivocado de estación (pensamiento obsesivo), lo quieres echar de la misma lo antes posible. En lugar de dejarlo tranquilo,  que los pasajeros suban y bajen... y que salga a su hora.... Tú fuerzas la maquinaria porque quieres que salga antes, no te gusta tenerlo en la estación. Te molesta. Fuerzas la maquinaria para que salga antes de lo previsto y lo que consigues al final  es romper el motor. Como resultado, en lugar de que el tren se quede unos minutos, se queda días molestando en la estación.

Fondo con tema de tren bonito de dibujos animados para fotografía ...

Los pacientes con TOC "fuerzan el motor" debido a varios errores  acerca de  cómo funciona nuestra mente y acerca del significado de los pensamientos obsesivos del TOC. Algunos de los principales errores sobre el control y la  sobreestimación de la importancia de los pensamientos obsesivos serían:
  • Yo puedo controlar  por completo mis pensamientos. Lo que pasa y lo que no por mi cabeza lo escojo siempre yo. ERROR
  • Si lo pienso, es que dice algo de mí (muchas veces algo que supuestamente estaba escondido en lo más interno de su ser y que el TOC "revela"). ERROR
  • Cuanto más lo piense, más probable es que ocurra. ERROR
  • Si lo pienso, es que es importante (y por lo tanto, algo a lo que tengo que prestar atención). ERROR



También suelo poner otro ejemplo algo extremista (con toda la intención),  donde pretendo reflejar lo mismo pero de diferente forma. Todos los caminos lleva a Roma.

Imagínate que yo, Sara LLorens, voy de camino a la consulta una mañana cualquiera. Hoy mismo. Y que de camino aquí  se me han pasado cientos de pensamientos y entre ellos estos dos:

1. Tengo que comprar tomates para la cena de esta noche.
2. Y si degollara a mi abuelo.

Ilustración De Tomates Rellenos De Ensalada En Un Plato ...Teniendo en cuenta que esta noche tengo una cena con gente y me he comprometido a cocinar un plato especial  que lleva tomate.... Y teniendo en cuenta lo que puedas conocer de mí, de mi personalidad..., además de si te digo que tengo los sentimientos que la mayoría de los nietos  puedan tener por su abuelo, es decir, lo quiero y no tengo intención alguna de hacerle daño. Dime, si tuviéramos que escoger uno de los dos ¿Qué pensamiento de los dos es más importante? 
Sabemos que uno, el de los tomates, va a tener consecuencias en la realidad si no los compro a tiempo para la cena. Consecuencias más o menos importantes, pero consecuencias en el mundo real. El segundo, conociéndome, ninguna. ¿Entonces?


Una respuesta muy típica es: hombre, visto así el de los tomates pero el pensamiento del abuelo también tiene consecuencias en el mundo real porque me generaría mucho miedo y estrés. OJO:ME GENERA MIEDO Y ESTRÉS PORQUE LO INTERPRETO COMO UNA AMENAZA Y DE AHÍ LAS EMOCIONES. No al revés.  Y la razón por la que  le doy una importancia injustificada, es  debido a los cuatro errores que hemos mencionado más arriba.

Hay que trabajar para corregir esos errores acerca del control y la  sobreestimación de la importancia de los pensamientos obsesivos para así lograr verlos  como lo que son, no como lo que tememos que sean.

A fin de cuentas, los trenes son solo trenes.




Con posibilidad de terapia on-line

 
 

Únete a nuestro grupo en Facebook

Sara LLorens Aguilar
sllorens@cop.es

Comments