En septiembre me
voy a Alemania una temporada, concretamente a una pequeña ciudad llamada Lindau.
Una de las grandes ventajas del trabajo online es la de poder hacerlo desde cualquier
parte del mundo ¡Y el covid nos ha sobreentrenado para ello...! Debido a temas
profesionales y personales tomé la decisión de irme un tiempo y la vida me ha
llevado hasta allí. La vida es curiosa, las vueltas que da… El caso es que me
toca practicar el alemán como si no hubiera un mañana y de ahí a que pase bastante
tiempo viendo todos los vídeos de Youtube que caen en mis manos ¡aunque no me
entere de la mitad! La cuestión es practicar. El caso es que mientras buscaba
vídeos para motivarme y creer que estoy avanzando con el idioma… me iban
saliendo muchos otros de Mariam Rojas Estapé porque suelo escucharla con
frecuencia. Personalmente me gusta bastante porque cuando escucho sus vídeos lo
primero que me transmite, además de estar muy bien formada en su campo y ser
muy buena comunicadora, es la pasión que transmite por su trabajo.
Me encontré con
uno de sus vídeos que no había visto y decidí darme un break del alemán.... El
vídeo en sí habla de las bases fisiológicas del amor. Es un tema del que
todos hemos oído hablar por lo menos de forma general. A mí me parece un área
bonita y muy interesante porque, una vez más, observamos como “somos un todo”.
Mente, corazón y cuerpo están siempre comunicados. Tanto si lo parece como si
no.
Voy a hacer un breve resumen del vídeo, de las partes que a mí me parecieron más interesantes y te dejaré el link del mismo al final por si le quieres echar un vistazo. Empezaríamos por aclarar que en el amor nos encontraríamos con tres fases clave, que son estas:
1.Atracción
sexual: en esta fase pueden haber muchas personas que te atraigan física y
sexualmente.
2.Amor
romántico o enamoramiento: aquí es dónde nos enamoramos de alguien en
concreto y solo tenemos ojos para esa persona.
3.Relación asentada: aquí se encontraría una relación ya más asentada, en la que ambos llevan tiempo juntos y se ha creado un vínculo más sólido.
Si nos centramos
en la segunda fase, la del enamoramiento o amor romántico, a nivel bioquímico
se producen varios cambios que son los responsables de muchas de las
manifestaciones que presentamos cuando estamos enamorad@s, como por ejemplo no
poder pensar en otra cosa que en esa persona, ser monotemáticos, sentir nervios
cuando la vemos, mirar el teléfono 100 veces por minuto… y un largo etc.
¿Y cuáles son
estos cambios?
La serotonina
baja, lo que lleva a una mayor obsesividad. Por eso parece que no puedas
pensar en otra cosa que en la persona de la que estás enamorad@. Por otra parte,
la oxitocina, que está relacionada con el afecto, el cariño y la confianza,
aumenta. Y eso ayuda a crear un vínculo especial con esa persona en
concreto que no creamos con el resto.
La amígdala,
que es la zona del cerebro responsable de que sintamos miedo, se desactiva ¿Y
qué consecuencias tiene esto? Pues esto se traduce en que un@ se vuelve más
valiente, de manera que hace o dice cosas con las que no se atrevería en otra
situación. Te vuelves más atrevid@.
Además de todo
lo anterior, la corteza prefrontal, que es la parte del cerebro que
utilizamos para racionalizar y tomar decisiones, también se desactiva en parte como
la amígdala. Esto da lugar a no pensemos ni analicemos tanto las cosas
y seamos más impulsivos durante esta fase.
De hecho, tal y
como se comenta en el vídeo, cuando se está enamorad@, se activa el mismo
sistema de recompensa que en el caso de las drogas ¡Eso sí, con dos diferencias
importantes! La primera que aquí la recompensa no viene de una sustancia
externa y dañina. Y la segunda, que en el caso del amor no es perjudicial para
la salud sino todo lo contrario.
Según los
expertos, la fase de enamoramiento dura como alrededor de año y medio. La
verdad es que aunque se vive como algo extraordinario y con mucha intensidad,
sería muy difícil que nuestro organismo
aguantara ese ritmo a largo plazo, por eso tiene fecha de caducidad…Esto no quiere decir, como
ya sabemos, que lo que venga no sea bonito. Lo es, pero mente, cuerpo y corazón
lo viven a un ritmo más calmado. Y aquí es dónde entran los esfuerzos de cada
uno para mantener la llama, la chispa, la química (llámalo como
quieras) que surgió desde el principio entre esas dos personas. Y todo ese
torbellino de emociones, ese huracán, esas mariposas…. Van dando lugar (si lo hacemos
bien) a algo más sólido, más fuerte, a un vínculo mucho más potente y más
verdadero. Y ahí, en algún momento… cada uno en el suyo, es cuando pasamos del
gran cambio de estar enamorados a amar.
Te dejo aquí el vídeo completo:
sllorens@cop.es
Comments
Post a Comment